La sociedad de la nieve, la película

En 1973, un avión chocaba en los Andes y comenzaban 73 largos días de supervivencia para quienes aún vivían. El tema se ha llevado a libros y pantalla grande. Esta es ahora la versión que recoje de labios de los protagonistas su "testimonio definitivo".

Fue sencilla, pero la frase se volvería famosa: “Vengo que un avión que cayó en las montañas”. Ahí, en las montañas de los Andes, en 1973, un avión había chocado cuando los pilotos perdieron la visibilidad y la orientación. Ahí comenzó una odisea de supervivencia increíble para nuestros tiempos, una historia que la gran mayoría conoce sea porque la leyó en tu momento en los diarios, por alguno o varios de los muchos libros que se han escrito o visto alguna de las películas del tema.

Es decir: el tema no es original, pero sí altamente llamativo. Esta vez, se trata de la recopilación de los testimonios de los sobrevivientes, quienes narran lo que pasaron en su momento, a lo largo de 72 días sin equipo especial ni comida alguna, a cuatro mil metros de altitud. La película incluye material de archivo de la televisión chilena, filmaciones originales y testimonios de los involucrados en el rescate. El rodaje se hizo en el lugar mismo del accidente, donde aún pueden verse los restos del avión.

La película comenzó a exhibirse en Europa en el 2007 y apenas llegó a México, casi tres años después. La información provisional que se encuentra en el sitio web de la película es:

“Por primera vez, los 16 sobrevivientes revelan cómo fueron los 72 días en el corazón de los Andes. El testimonio definitivo sobre la historia de supervivencia más asombrosa jamás contada. El vuelo, el impacto, el alud que mató a ocho amigos, la decisión de alimentarse de los cuerpos de los compañeros, la expedición en busca de ayuda, el rescate y la vida que siguió. Un testimonio de fe y esperanza. Una película uruguaya que recogió galardones en los más prestigiosos festivales internacionales.”

Habrá que verla para conocer ese “testimonio definitivo”.

Carlos Rangel Plasencia